Las dudas de la vida

 Cual es la razón que nos impide tener una salud mental sana. Miedo, vergüenza, no saber a que nos enfrentamos, miles más. Cargar con sentimientos que nos dañan, es como mantener dentro del cuerpo piedras ardiendo, espinas que nos laceran, ahogándonos cada día, por situaciones que, generalmente ya pasaron, por ende, no las podemos cambiar. 

Pero el hecho de no cambiarlas, no significa que no se puedan renombrar, ajustar, colocarlas en otra postura. No significa que dejemos de ser quienes somos, seríamos mucho mejores, nos descubriríamos como las personas que en realidad queremos ser, aquellas que nos definen, que nos lanzan a la vida sin esas cargas que solo nos debilitan. 

Hace muchos años, yo era como puede haber miles de personas. Llena de insatisfacciones, colmada de vacíos, insegura. Dejaba que la vida me llevara como barcaza sin rumbo en las aguas turbias de un tormentoso mar. Podría no sentirme orgullosa de muchas cosas que hice en la vida, pero llega un punto en que eso, no es vivir, es flagelarnos. Lo errores, no son más que la manera en que aprendemos, la forma en que diferenciamos de las buenas y malas determinaciones que tomamos, pero aun, cuando ya las llevamos a cabo, eso no quita que esas mismas nos ayuden a seguir adelante, sabiendo como actuar en el hoy y en el ahora. 

Dudamos de todo, yo en lo personal, dudo e si buena madre, o si lo soy aun, dudo de si mi capacidad de enmendar mis heridas es posible, duco de ser buena persona, dudo de si mis palabras simplemente escritas en un ordenador, pueden ayudar a alguien; pero nunca, en todo este tiempo me había dado cuenta de que, todas esas dudas solo son mis chalecos salvavidas para estar en la tempestad, mis cuerdas para poder sostenerme en una montaña escarpada, mis anclas para no salir volando en medio de una tormenta, mis pilares que me sostienen, esa plataforma donde habito y que me permite ser quien soy. 

Por el momento y a partir de ahora, mis palabras serán no solo para mí, las externaré, no solo por salud mental, serán para decirme "adelante" tú puedes, tú sabes, tú  lo puedes lograr, tú vales, tú sigue adelante a pesar de todo. 

El dolor que estoy sintiendo, es muy grande, no lo puedo medir, no lo puedo explicar, no lo había sentido antes, nunca en la vida, solo sé que, me está llevando hacia la superficie, hacia adelante y arriba, que me está sirviendo de motor, de ancla, de cuerda, de chaleco. Que me está dando la oportunidad de sentir que vivir, depende de uno, que dejar de sentir dolor, es cuando uno decide que quiere dejar de sentirlo y encausarlo, hacernos responsables de nuestra propia historia, parchada, pero entera, en trozos pero unida, manchada pero impoluta de temores y dudas. 

Podemos ser tan auténticos y honestos como queramos, podeos ser lo que deseemos ser, asumiendo nuestra propia historia, con todo y sus supuestos errores, vacíos e insatisfacciones o frustraciones.